Nara es una de las paradas más populares entre los viajeros a Japón y se debe a que en pocos lugares en el mundo se tiene la oportunidad de caminar entre ciervos que te darán la bienvenida. Hay que recordar que Nara fue una de las tantas capitales de Japón, por lo que mantiene un aire tradicional y es por eso que vale explorarla más allá de los atractivos más conocidos.
Al encontrarse entre dos ciudades importantes (Kioto y Tokio), llegar es muy fácil y rápido, es muy recomendable tomarse al menos medio día para visitarla, iniciando por el parque en donde serás recibido por los habitantes más célebres del lugar, los ciervos (Shika); la leyenda cuenta que durante el siglo VIII, un dios montado en un ciervo blanco visitó el monte Mikasa y de ahí , que sean considerados sagrados por ser los mensajeros de los dioses y protectores de la ciudad.
Los ciervos están muy acostumbrados a las personas por lo que son muy dóciles, sin embargo hay que tratarlos con respeto y no molestarlos, ellos por sí solos tratarán de acercarse a ti en busca de comida, que por cierto puedes comprar en forma de galletas (Shika Sembei) que cuestan 150 yenes, no los alimentes con otras cosas. Por último, ten cuidado porque suelen ser curiosos y buscarán en tus bolsas y bolsillos en busca de comida, ellos son muy agradecidos así que intenta hacerles una reverencia y te sorprenderás cuando ellos te contesten igual.
Otra cosa que disfrutarás está dentro del mismo parque, y se trata de uno de los templos más imponentes por su tamaño que verás en tu viaje a Japón. La puerta Nandaimon es la antesala para el templo Todai-Ji que es el edificio de madera más grande del mundo (y eso que es una tercera parte del tamaño original) y dentro de él está el Daibutsuden o salón del gran buda, en donde está un Buda de 15 metros. Encontrarás también otros objetos interesantes dentro del templo y no olvides tratar de pasar por el agujero del pilar, claro sólo si eres de contextura delgada porque es del tamaño de orificio de la nariz del Buda, si lo logras obtendrás la iluminación en la otra vida. No hay foto o video que logre capturar lo imponente del templo por lo que no dudes en visitarlo.
Aunque estos son los atractivos más conocidos de Nara, hay otros puntos de interés que te recomendamos conocer, como el templo Kofuku-ji que tiene una gran colección de Budas y una pagoda de 5 pisos que al estar cerca de un estanque lo convierten en una de las postales más bonitas del paseo. El templo Kasuga y sus 1800 linternas de piedra. Visitar el salón Nigatsudo y tener una vista panorámica de Nara.
¿Cómo llegar?
Puedes tomar el tren hacia Nara desde Osaka o desde Kioto eso dependerá de tu itinerario, todo el recorrido está incluido en tu JR Pass.
Puedes llegar a la estación Nara o Kintetsu Nara (ésta última está más cerca del parque). Una vez ahí puedes tomar un autobús amarillo (Nara City Loop Line 1 y 2) que te llevará en recorridos alrededor de la ciudad (entre ellos el parque), o caminar (que es lo que recomendamos) esto puede tomar entre 20 a 40 minutos pero te dará la oportunidad de hacer una que otra compra de souvenirs en el camino.
Como podrás ver esta visita es muy recomendable, dependerá de ti cuánto tiempo quieres darle al recorrido ya que puedes hacerlo en medio día o tomarte el dia entero para disfrutar de la ciudad.
Buen viaje.
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